Qué lejos aquello de la Guerra de las Galias, de la primera declinación Rosa, rosae y de la lengua madre y el latón padre. Sin embargo, una vez más primavera y Semana Santa, y muy cercano y repetido en el Domingo de Ramos el Pueri hebraeorum portantes ramos olivarum, obviaverunt Dominus -Los niños judios portando ramos de olivo, salieron al encuentro del Señor.-
El orbe cristiano se dispone a vivir la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús. La Semana Santa, un período de tiempo de recogimiento y de fervor nos lleva a reflexionar sobre la fe y nuestras creencias. Mucho tiempo ha pasado y los cambios han sido también muchos. Pero la tradición sigue con otra puesta en escena, si se me permite la expresión, hoy con los cambios de nuestra sociedad para mejor. Lo que antes era una Semana de recogimiento y silencio, en estos momentos que vivimos, es una semana de viajes, de playa y de otras actividades impensables en nuestra niñez.
¡Domingo de Ramos! de nuevo ha llegado, se sienten tambores y cornetas. Un día de alegría entorno a la familia, de inicio de muchos niños en el camino de ser cofrade. La procesión de La Pollinica, La Burrita y otras denominaciones según cada lugar, es una cantera como ya he dicho de nuevos cofrades. Recuerdo ese día como muy luminoso, con esa luz de nuestra primavera, muchos niños vestidos de hebreos y teniendo presente, siempre el refranero de está España nuestra-Quien no estrena el Domingo de Ramos, se le caen las manos-. Así, nuestras madres en aquellos años de escasez, nos hacían estrenar, aunque fueran unos simples calcetines. Luego la procesión, con una multitudinaria asistencia de niños con sus palmas, ramos de olivo y con esa inocencia y candidez propia de la edad.
Pues eso PUERI HEBRAEORUM......., por muchos años.
Por Ricardo Bajo León
Por Ricardo Bajo León
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